"Maldigo la poesía concebida como un lujo cultural por los neutrales que, lavándose las manos, se desentienden y evaden.
Maldigo la poesía de quien no toma partido hasta mancharse."

Gabriel Celaya

dimarts, 10 de març del 2009

Entrevista a Carlos Henríquez Consalvi “Santiago”, de Radio Venceremos

Un elemento clave para la comprension de la guerra en El Salvador es, sin duda, el Sistema Radio Venceremos, sistema de comunicacion y propaganda para el FMLN en las montañas de Morazan - noreste del pais -. Fue "la voz oficial" de la guerrilla y elemento cohesionador entre el Frente y la poblacion civil. Durante 11 años fue objetivo militar prioritario para el Ejercito Nacional quien, a pesar de anunciar repetitivamente la destruccion de la emisora, no consiguio dar con ella.

Carlos Henriquez Consalvi "Santiago" fue fundador y conductor de la radio clandestina Venceremos des de el inicio de la guerra el 1981 hasta la firma de los Acuerdos de Paz el 1992. De origen venezolano, estubo participando, periodisticamente, con la "Revolucion" sandinista en Nicaragua contra la dictadura de Somoza, escribiendo editoriales contra el regimen y participando en la creacion de medios de comunicacion alternativos.

Actualmente es director del Mudeo de la Palabra y la Imagen en San Salvador, dedicado "al rescate y proyeccion" de la memoria historica y del patrimonio cultural salvadoreño.

A continuacion, Santiago nos cuenta sobre su experiencia en la guerrilla y el papel y evolucion de Radio Venceremos en el desarrollo de la guerra; asi como su vision de los medios de comuniacion de masas y de contra-informacion.


Usted se viene de Venezuela para El Salvador en el 80, para crear la Radio Clandestina en el corazón de Morazán, zona de influencia del ERP y el FMLN. ¿Desde quién y para qué hubo un planteamiento de armar una radio de estas características en la guerrilla?

Bien, el planteamiento de armar una radio clandestina se da por la misma situación política y social que se está viviendo en ese momento, de mucha polarización, y ante una persecución que estaban teniendo los medios independientes: había asesinatos de periodistas,… Y en ese contexto, y a las puertas de una lucha social que ya estaba por estallar con mayor fuerza, indudablemente que sólo una radio clandestina era la que podía realizar esta función de informar y acompañar a esta lucha social que comenzaba ese 10 de enero de 1981, que es cuando la radio comienza a transmitir.

Porqué, ¿a usted lo van a buscar expresamente?

No, es decir… bueno, es una historia muy larga… yo estaba vinculado a la revolución nicaragüense y estando allá conozco salvadoreños y salvadoreñas, y hay una vinculación y allá nace la idea de incorporarme en ese proyecto.

¿Qué se pretendía en unos inicios con la Venceremos? ¿Cuál eran sus objetivos?

Bueno, fundamentalmente, ser la voz informativa, de agitación de la insurgencia salvadoreña, que cumpliera un papel estratégico que es el de las comunicaciones en tiempo de guerra, denunciando violaciones a los derechos humanos, informando sobre lo que estaba sucediendo en el país en momentos en que había censura de prensa, donde no había libertad de expresión.

Y… imaginamos que en un principio contaban con muy pocos medios o medios muy precarios, no?

Sí, evidentemente. Se comenzó con un viejo transmisor de la segunda guerra mundial, dos casettes y una pequeña grabadora. Eran medios muy sencillos.

Pero con los años la Radio Venceremos va creciendo, hasta convertirse en “la voz oficial del FMLN” y un elemento cohesionador entre la guerrilla y la población. ¿Cuál cree que fue la incidencia de la radio en el desarrollo de la guerra?

Bueno, como te decía tuvo un papel estratégico por cuanto permitía llevar a todo el mundo la voz de la insurgencia, llevar eh… participar en el debate ideológico que en esos momentos se estaba desarrollando, no solamente en el país, sino a nivel mundial, ante la administración Reagan, que era la que estaba interviniendo directamente en los asuntos políticos y militares de El Salvador. Y, fundamentalmente, tener una incidencia directa en la población, en las bases de apoyo, en los mismos combatientes: la radio era una voz de aliento e inyectaba moral a las fuerzas combatientes.

Y entonces, quizás por esa fuerte influencia que tiene se convierte en una obsesión para el ejército, llegar a encontrar a la Venceremos. ¿Cómo consiguen que no logren ser localizada y con qué dificultades se encuentran?

Bueno, como la propaganda de la administración Reagan decía que la insurgencia estaba derrotada el hecho de que la radio transmitiera todos los días desde un punto geográfico específico, eso echaba por tierra esa propaganda y por lo tanto la Radio fue objetivo militar durante los 11 años. Bueno, y pudo sobrevivir y pudo continuar su trabajo gracias al apoyo popular que la población la apoyaba, la encubría, daba información. Y fue así que ante una ausencia de grandes cerros y grandes montañas, la población se convirtió en la montaña que logró mantener este proyecto.

Porque la programación iba dirigida tanto a combatientes como a la opinión pública en general. ¿Cómo era la programación? ¿Quién participaba? ¿Participaban las poblaciones que estaban bajo control?

Bueno, la programación estaba integrada por un noticiero, por radio-novelas, por programas históricos,… participaba la población campesina, se entrevistaba la población de la zona, inclusive algunos integrantes campesinos de la zona llegaron en algún momento a participar en los programas de opinión,…

¿Incluso niños también, no?

También niños. En alguna oportunidad ochenta niños huérfanos de guerra, en su mayoría, este… hicieron una programación especial.

Y, al principio fuisteis como tres o cuatro personas que empezasteis con el proyecto, y al final erais decenas, no? ¿Cómo os organizabais?

El campamento casi siempre tenía entre 25 y 30 personas, verdad? Cinco para la producción, para la redacción, otros cinco para lo que llamábamos el monitoreo de noticias escuchando las noticias,… cada quién se especializaba en una radio internacional o nacional para saber qué estaba pasando en el mundo y cómo corresponder en los editoriales. Y otro grupo de siete u ocho compañeros de la seguridad, y el resto era logístico, para la gasolina, alimentación,… Y una red por todo el país de pequeñas unidades insurgentes que a través de sus radios nos pasaban información desde cualquier parte de El Salvador.

Dice usted que son 25, ¿para coordinar estas 25 personas?

Bueno, vivíamos en un solo campamento, nos levantábamos en la mañana e interactuábamos permanentemente. Hacíamos una reunión diaria para escuchar las noticias y para determinar qué editorial, qué radio-novela, qué entrevista del día se iba a hacer, y luego se procedía a la grabación.

Y en el 92 cuando se firman los Acuerdos de Paz, ¿la Radio desaparece? ¿Qué se hace de la Radio?

La Radio desaparece en tanto emisora de guerra. Hay un esfuerzo por continuar posteriormente un proyecto de radio, que desafortunadamente en tiempos de paz no sobrevivió por visiones divergentes de lo que debería ser un medio de comunicación en tiempos de paz. Yo me retiro de eso que al final fracasó, y estoy en esto que es también un proyecto de comunicación, comunicando memoria, el rescate de las fechas culturales,…

Y luego te queríamos preguntar ya en términos más generales y de opinión,… Nosotros somos de fuera, entonces llevamos pocas semanas aquí pero lo que hemos notado mucho, y más ahora en campaña electoral, es el fuerte control mediático que hay en los medios, sobretodo en la prensa, en El Salvador. No sabemos bien porqué se da esta concentración de poder en los medios, y cómo es que no hay una prensa escrita fuerte que sea independiente…

Bueno, sencillamente porque aquí el poder económico es el que históricamente ha controlado los principales medios de radio y televisión, y ustedes que vienen en momento electoral se dan cuenta que ellos están defendiendo sus privilegios y defendiendo esos intereses que ellos representan, ¿verdad? Y hay medios alternativos independientes pero algo débiles, aunque hay que hacer mención de algunos: uno por internet que es el Faro, que es independiente totalmente y muy crítico; está el CoLatino, que tiene poca circulación pero hace un papel importante,…

Y por completar el panorama de los medios de comunicación hay que decir que hay 22 radios comunitarias cumpliendo una función muy importante, que son las radios que están en las comunidades, convirtiéndose en el corazón, en los oídos y en la voz de esas comunidades, que son la otra parte, la contraparte de lo que se hace en los grandes medios que es la exclusión, la manipulación, ¿verdad? Entonces, esto es producto de toda esta lucha social que ha llevado el pueblo salvadoreño.

Un medio alternativo o independiente, ¿debe ser objetivo en sus escritos o en su programación?

Yo creo que para todos los que somos periodistas, yo creo que la objetividad es fundamental en todo ejercicio del periodismo. La cociosidad del periodista en investigaciones, va a encontrar todas las lacras sociales y va a poder denunciar, ¿verdad? Y sobre todo, la objetividad en países como los nuestros es subversiva, por eso es que tanto se cierran los espacios para que haya un periodismo independiente y objetivo.

Quien quiere comunicar, quien quiere informar no puede hacer propaganda. Ahí muere el periodismo y muere la comunicación.

Ya para acabar, ¿qué papel cree que deberían tener los medios de comunicación alternativos o de contrainformación?

Bueno, es un poco lo que están intentando de hacer estas radios comunitarias en El Salvador, que en un medio tan hostil de, cómo decíamos, manipulación de intereses es hacer un periodismo, hacer un medio de comunicación que responda a los intereses de cada comunidad, que respondan, que informen de todas las realidades nacionales. En ese sentido hay un esfuerzo que está consolidándose en el país, de estas radios que tienen informativos que comparten todos, al mediodía y, de alguna manera, débilmente pero le hacen la contrapartida o la oposición a esos medios que asfixian y que durante muchísimos años han jugado un papel de desinformación, sobretodo durante las campañas electorales, ¿verdad? Y quizás un fenómeno nuevo que se está dando en el país que tiene que ver mucho con la conciencia que está ganando el pueblo salvadoreño, es que a pesar de esta avalancha de mensajes, de desinformación,… la gente ya está abriendo los ojos, y está discerniendo qué es mentira, qué es verdad, y cuáles son sus verdaderos intereses y quiénes los defienden.

Pues esto es todo. No se si quieres añadir alguna cosa…

Sólamente darles las gracias por haber venido…

A usted, por favor. Muchas gracias por su tiempo!